El oro es uno de los metales más apreciados y utilizados en el mundo de la joyería, por su belleza, durabilidad y por su valor. Además, es un material que está cada vez más de moda. Sin embargo, ¿te has preguntado alguna vez si el oro se oxida? Este interrogante ha generado todo tipo de mitos y confusiones a lo largo del tiempo. Para resolver tus dudas sobre si tus joyas corren peligro de oxidarse con el paso de los años, vamos a explicarte en este artículo qué factores pueden afectar a su brillo. También aprenderás a cuidar tus joyas de oro para que se mantengan como nuevas y las puedas disfrutar durante mucho tiempo.

¿Qué es la oxidación y por qué afecta a los metales?

Antes que nada, vamos a explicarte qué es realmente la oxidación de los metales. Pues, la oxidación es una reacción química entre un metal y el oxígeno presente en el aire o el agua. Los óxidos que se forman durante este proceso suelen tener un color diferente al del metal original y por lo tanto son bastante visibles. Puede variar en apariencia, desde el óxido rojo del hierro hasta el óxido verde del cobre. La presencia de óxidos no solo afecta a la estética del metal, sino que también puede debilitar su estructura.

¿Las joyas de oro se oxidan? Mitos y realidad

el oro se oxida: mito o realidad

El oro es un metal precioso y tiene una muy baja tendencia a oxidarse. En condiciones normales, el oro puro es prácticamente inalterable y suele conserva su brillo y color amarillo característicos. Y aquí ya hemos dado la primera pista.

La mayoría de las joyas de oro que adquirimos no son de oro puro. Es un material relativamente blando que tiende a deformarse o rayarse. Por ello, en el mundo de la joyería, el oro suele ser una aleación con otros metales como el cobre, la plata, el zinc o el níquel para aumentar su durabilidad. ¿Cuál es la desventaja? Ya lo habrás adivinado. Estos metales sí pueden reaccionar con el oxígeno, la humedad o productos químicos y se oxidan. Así es que nuestras joyas de oro (que no es puro) en ocasiones cambian de color si no las cuidamos adecuadamente. 

Los quilates nos dan una idea de lo propensas que son nuestras joyas de oro a oxidarse. Cuantos más quilates, menos tenderán a oxidarse, ya que contienen más oro y menos porcentaje de metales oxidables. Además, algunos metales que se usan en las aleaciones de oro son más propensos a oxidarse que otros. Por ejemplo, el cobre y el níquel son metales que se oxidan con facilidad, y que pueden dar a las joyas un tono verdoso o grisáceo. Por eso, es importante conocer la composición y la calidad de las joyas de oro que compramos.

Cuidados de joyería para prevenir la oxidación

Como acabamos de aprender, también las joyas de metales nobles se deben cuidar adecuadamente para evitar que se deterioren o pierdan su brillo. Sigue nuestros consejos si quieres que tus joyas de oro no se oxiden y se mantengan como nuevas.

  1. Evita el contacto con el agua: recuerda que el agua puede contener impurezas o sustancias que pueden reaccionar con el oro o con los metales de la aleación, provocando manchas o decoloración. El agua salada del mar o el agua clorada de la piscina pueden dañar tus joyas de oro con el tiempo. Si quieres que te duren durante mucho tiempo más, quítalas antes de bañarte en el mar o en la piscina. O, al menos, enjuágalas con agua dulce después del baño.
  2. Evita los productos químicos: existen productos químicos que pueden acelerar la oxidación de los metales y dañar la superficie de tus joyas. Quítatelas cuando vayas a usar productos de limpieza e intenta que no entren en contacto con tus perfumes y la laca del pelo.
  3. Limpia tus joyas de oro regularmente: mantener las joyas de oro limpias es esencial para eliminar cualquier sustancia que las pueda dañar. Usa un paño suave humedecido con agua tibia y un jabón neutro. Frota la joya de oro suavemente y sécala a continuación con otro paño limpio. ¡Nunca uses productos abrasivos como el alcohol, amoníaco o bicarbonato! Si te preocupa dañar tu joya, usa soluciones específicas para limpiarlas. Déjate aconsejar por un joyero.
  4. Almacenamiento adecuado: almacena tus joyas de oro en estuches o bolsitas individuales para prevenir que entren en contacto con cualquier producto que las pueda dañar. Además, de esta manera evitarás el roce con otras joyas. 

Siguiendo nuestros consejos, tus joyas de oro no se oxidarán y te pueden durar toda una vida sin deteriorarse. Ahora que ya te sabes todos los trucos, elige tu joya de oro en nuestra tienda online de TOUS. ¡Navega por la sección dedicada a las joyas de oro y descubre los pendientes más originales y los colgantes de oro más extravagantes de nuestra colección!