La colección Batala representa, con sus anillas unidas entre sí, el enlace y las conexiones de la humanidad, viviendo en armonía unos con otros. Cada una de las gemas que adornan las joyas de plata vermeil de esta colección simbolizan un individuo, con sus características y propiedades únicas, mientras que las anillas representan las conexiones humanas. Entre las gemas de la colección destacan la amatista, una de las variedades más apreciadas del cuarzo transparente de tonos violetas y símbolo de honestidad ; la howlita, de color blanco con venas negras está vinculada a la paciencia y la calma ; la rodocrosita, representa el amor desinteresado y la compasión, y las perlas: gemas de origen orgánico que, por su aspecto delicado, se han asociado tradicionalmente a la pureza y la inocencia, siendo consideradas también como amuletos de protección y buena suerte.