Años después de lanzar nuestro icónico sello en forma de oso en ónix y plata, reinventamos este clásico con una explosión de color y nuevas texturas. Presentamos una versión renovada que mantiene intacta su esencia, ahora enriquecida con gemas naturales además de gemas creadas en laboratorio que aportan sostenibilidad y un brillo único. Piezas trabajadas en plata de primera ley y plata vermeil que celebran la alegría, el estilo y la identidad inconfundible de la casa.